Coleco, que había sido famoso por su serie Telstar, regresaría al mercado de los videojuegos con ColecoVision. Las capacidades gráficas de la consola iban más alla de lo que sistemas como Atari 2600 o Intellevision lograban, y cada ColecoVision incluía una adaptación de alta calidad del hit de arcades de Nintendo, Donkey Kong.